Manifiesto
Glasso significa ojo.
Y Nuestra visión del mundo es nuestro mundo. Mirar es una manera de describir. Y de escribir.
Entra a este mundo en decostrucción. Sin gurús, ni anglicismos, ni claves que lo solucionan todo. Un mundo libre de vende humos.
Miramos esta profesión con sana descofianza. Ponemos en duda lo escrito, y la manera de escribirlo.
Habitamos un espacio inabarcable, la comunicación no aguanta categorías, las rebalsa. Nos fascina, es líquida.
Nuestra sonrisa depende de tu alegría, nuestro estilo es el que te haga feliz.
La incertidumbre nos motiva, en Glasso habitamos las paradojas. Clásica y moderna, sólida y líquida,
Ven a vernos mirar.
Topa!
Deseamos seguir así, con la certeza de trabajar para vivir. No le tememos a los desafíos, pero elegimos el color de nuestro marrón.
Deseamos crecer de manera sostenible, con nuestras familias como prioridad. Hemos descubierto que cuando más felices somos, mejor trabajo hacemos.
Equipo
Ketu
Esa cabeza no para nunca de dar vueltas. Ver, leer, conocer y analizar todo lo de alrededor para después crear desde cero. Influencias desde lo más underground a lo mainstream, desde lo clásico a lo moderno.
Ha ejercido todos los periodismos posibles: radio, prensa, televisión, online… Y como buen periodista de raza siempre está pegado a la actualidad.
Conoce los secretos de la comunicación como pocos y cuando escribe, si se lo propone, lloras. También sabe hacer reír y todos los entresijos de un buen asado de carne. El otro fuego con el que se le cae la baba es Sua, su hija.
Para confirmar su estereotipo de genio tiene un don especial para perderlo todo: Gafas, llaves, mochilas… Perder cosas es de guapas y modernas.
Pasional e hincha de Boca Juniors, Riquelme y Maradona. Gran habilidad y predilección por la metáfora futbolística. Podría decirse que es el Ander Herrera de Glasso: Un entrenador que se viste de corto.
Diego
El Google Calendar le pregunta a él cuando tiene dudas. Todo siempre bien organizado y planeado. Periodista, productor técnico, productor ejecutivo, comercial, aita de Kai, y Lía, bulldozer…
Le gusta conocer personas y mundo. En cuanto puede, se marca un viaje y se saca una foto saltando. Pero poco a poco se está quitando de Mr. Wonderful.
Ha nacido para socializar y para la acción asociativa. Si hay algo por hacer y alguien con quién hacerlo, allí van a estar sus brazos, sus piernas, sus ideas, su entusiasmo y, en el peor de los casos, su voz. Le echaron hasta del coro de la cárcel. Nadie es perfecto.
Liderazgo de los que se manchan las manos y respetan la opinión de la mayoría. Se deja la piel como si le entrenara Bielsa. Por complicado o imponente que sea el entuerto, él se monta en la wrecking ball como Miley Cyrus y derriba los muros que haga falta.
Te reto a que te caiga un poco mal. No lo vas a conseguir.
Jon
Técnico, operador de cámara, iluminación, sonido, realización, edición, post-producción, etalonador… Lleva tanto tiempo usándolo que el lenguaje audiovisual es su lenguaje nativo. Ve el mundo en 16:9. Le gusta cacharrear, montar, desmontar, instalar y configurar cualquier aparato.
Más temple que John Wayne en el hombre tranquilo. Tiene gatillo fácil para el chiste y mecha larga para el conflicto. Y si hay que tirar el penalti, lo tira.
En cuanto puede se enfunda una guitarra o un bajo. Y si le dejan canta también. Canta peor de lo que él cree, pero mejor que la mayoría. A su hijo Ibai y a su hija Laia lo mismo le caen una de Miliki que una de Extremoduro o Queen.
Minucioso y detallista. Sueña con lograr hacer algún día la paella perfecta: con el arroz en el punto justo, los ingredientes perfectos y que sea para 20, por lo menos.
Char-lee Mito
Diseñador, editor, ilustrador, colaborador de radio, frontman, músico, autor de libros… faro del underground bilbaíno. Creador multidisciplinar. Arte en vena. Char-Lee es punk, rock & roll y muy muy glam. Unas veces lleva bigote y otras no, pero él trajo las patillas a Bilbao.
También es el Sr. Ah! Mito, Carlos… tiene un nombre para cada faceta artística y siempre sube a rematar en los córners.
Como si el Corto Maltés hubiera atracado en Zorrotzaurre. Sin gorro de marino ni necesidad de viajar mucho más allá de Galicia, porque el mundo es como él lo dibuje.
Motxi
La business angel. Nervio puro. Tiene 2 marchas: punto muerto y sexta. Hace agujeros más rápido que un minero asturiano y después corre como si le persiguiera el demonio. Tiene también otras muchas virtudes. Ninguna rentable.
Su debilidad son los palos, las piñas, las pelotas, los huesos, los gatos, los pájaros, las lombrices, las lagartijas… bueno, tiene bastantes debilidades. Si alguien se acerca por el pasillo a veces ladra, pero si viniera un ladrón de verdad se lo comería a lametones.
El agua del mar le da frío y si ve una señora con pelo blanco se piensa que es mi suegra. En realidad no ve muy bien, pero tiene el olfato y el oído de un espía ruso.
En verano duerme estirada y en invierno se enrosca. Fidelidad incondicional. Aunque te puede llegar a vender por una golosina. O una caca.